Entradas populares

miércoles, 12 de noviembre de 2014

Relaciones complicadas

Los seres humanos somos seres sociales, nacimos para vivir en sociedad; por eso nos dividimos en varios aunque en realidad seamos uno solo, todos partes de la misma energía creadora...
Para que podamos aprender lo que tenemos que aprender, la vida nos reúne con distintas personas, y, muchas veces, creamos relaciones con ellas.
Algunas relaciones resultan muy amenas, con pocos inconvenientes, y hasta pareciera que la otra persona nos ayuda más que traernos problemas, y, puede ser, que esa sea la función de esa persona en nuestra vida, ayudarnos. Y, en otros casos, la persona parece traernos conflicto tras conflicto. En los casos anteriores, muchas veces podemos decidir terminar con esa relación, y, notar después que nos surgen conflictos similares con otras personas y que parece que eso nunca se terminara.
En este artículo te voy a comentar algunas cositas sobre las relaciones complicadas y cómo salir victorioso de ellas...

Si tenés una complicación en una relación con alguien, es porque hay algún asunto tuyo cuya resolución aún tenés pendiente. Recordá qué la relación más importante es la que tenés con vos mismo. Todas las otras son un reflejo de esa relación. Esto es así porque cada uno de nosotros es fuente de amor, cada uno de nosotros es capaz de amar y ser amado, pero esto se complica cuando hay cositas que estorban en el medio, que no nos dejan amarnos a nosotros mismos. Si no nos amamos a nosotros mismos no podemos amar limpiamente, lo que hacemos es amar con apegos, esperando cosas a cambio, pretendiendo que cambien los demás en lugar de hacerlo nosotros ¿Por qué? Porque hay algo que nosotros no tenemos y lo buscamos desesperadamente en el otro.
Todo esto quiere decir que si a vos te falta algo y querés que el otro te lo de, la relación va a tener una complicación porque no es limpia.
Muchas veces, dos personas que pasan por esa experiencia negativa del apego se juntan, porque el universo los reúne con el fin de que aprendan uno del otro. Una vez que uno cambia, es muy probable que lo haga el otro también. Pero esto no quiere decir que lo haga inmediatamente. Es muy probable que le cueste renunciar a sus apegos, que tanto se los inculcó la sociedad con sus canciones, sus películas, etc. Canciones con frases como "sin vos no soy nada", "sin vos me muero", "no puedo vivir sin vos", al igual que películas, novelas, etc., nos hicieron creer que el amor es eso, apegarse completamente al otro y poner nuestra vida en sus manos, depender del otro para nuestra propia felicidad; pero, si lo pensás un momento, quizás te convenzas de lo contrario...
Vos pensá que la vida no te da personas para que te apegues a ellas, si no para que aprendas de ellas y luego puedas disfrutar. Para ser feliz con otro, primero tenés que ser feliz solo, para demostrarle al universo que podés, que aprendiste a hacerlo. Si la vida te distancia de alguien es probable que sea porque estabas muy apegado y eso no te hacía bien... Con el apego no hay felicidad real, si no dependencia. El amor debe ser libre.
Ahora la pregunta es, ¿Cómo hacés para liberarte del apego con tanta necesidad de que el otro llene tus vacíos? Bueno, fácil: llenando esos vacíos. Tu tarea para solucionar este problema es completarte vos mismo, analizándote y viendo qué te falta, pero, sobre todo, cultivando el amor en vos mismo. Todo siempre tiene que ver con el amor.
Si vos estás lleno de amor, ya no vas a unirte a otro para que te de ese amor que te falta, porque lo tenés. Entonces, vas a estar con el otro porque querés hacerlo, porque disfrutás de su compañía.  Hay diferencia entre querer y necesitar, y en esa diferencia se encuentra el apego.
Para cultivar ese amor, tenés que creerte una persona amorosa, enviar amor a tu mente, a tu cuerpo, a tu vida, a los seres que te rodean; amar lo que sos, lo que hacés, el universo, a la creación.
Así el otro te de todo lo contrario, vos dale amor y deseale lo mejor. No tenés porqué actuar como él, porque eso no te hace bien. Vos ya entendiste, vos aprendiste, ya no estás en sintonía negativa como esa persona que te pone a prueba. Si das amor la vida te da amor, quédate tranquilo. Esas experiencias negativas están porqué todavía algo falta...
Sentite parte del universo, parte de la creación, no te olvides de Dios, que mora en tu interior, no te olvides que sos parte de él, que él está en vos, y que siempre que lo recuerdes, te unís con el amor. Sos amor. Independientemente de que tus padres te hayan o no creado con amor, en tu creación está Dios, porque está en todos. Por lo tanto, tenés amor y sos amado. Es por eso que se dice que "Dios te ama". Si sentís ese amor y esa unión con la creación, podés recargarte de amor y no necesitar que otros te lo den. Al tener contacto con otro, podés entregarle amor, pero no vaciándote, si no siendo una fuente inagotable de amor, siempre recargándote.

En conclusión, las relaciones complicadas siempre están para ponernos a prueba, para que podamos darnos cuenta del amor que nos tenemos a nosotros mismos. Debemos amarnos a nosotros mismos, unirnos con Dios, que está en nuestro interior, y recordar así que somos amados para no unirnos a los otros por necesidad, si no por elección, porque no necesitamos amor, si no que ya lo tenemos.

¡Espero que te haya sido de mucha utilidad este artículo!

¡Éxito en tu camino!

¡Paz y amor a todos!

Noelia Soledad Russo.



No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Nota: sólo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.